Se me ocrrió también hacer una piñata para el cumple de Pablo y él me ha ayudado en todo el proceso. Los peques alucinaron al verla aparecer y se lo pasaron muy bien tirando de la cuerda y recogiendo los regalos.
El duro trabajo vale la pena y está recompensado al ver la Sonrisa de Pablo en cada cosa que hacemos juntos.
Espero que os guste.